La principal ventaja de hacerse uno mismo su casa, o rehabilitar una existente, es hacerla según nuestras necesidades, a nuestro gusto, tener una vivienda única, seguir y conocer de cerca su construcción, ahorrarnos el incremento de precio que supone la intervención de un promotor, y conseguir una mayor calidad al ser una casa para vivir

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Otra de las ventajas es que establecemos una relación cercana y directa con los intervinientes en la obra, con el arquitecto, el aparejador, el constructor y con la propia obra, pudiéndola seguir desde el principio y participar en el proceso de gestación, la ubicación y la orientación de la casa en el terreno, la distribución de los espacios, los materiales a emplear, la elección de un estilo adecuado al entorno.

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El proceso habitual es adquirir un terreno edificable y elegir a un arquitecto que nos asesore con detalle de los pasos a seguir, y que de acuerdo a nuestras necesidades y teniendo en cuenta la normativa técnica y urbanística elabore un proyecto. Con todo, antes de comprar el terreno, podemos ponernos en contacto con el arquitecto, para que sin asumir grandes gastos, estudiar conjuntamente las posibilidades de nuestro objetivo, así como realizar estudios previos de distintas parcelas.

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El primer paso importante es la selección del arquitecto. Como en todas las profesiones, los hay mejores y peores. Los hay que más que un gasto suponen una inversión para el cliente y también lo contrario.

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El será el que piense y materialice sus ilusiones e ideas abstractas a través del proyecto. Un buen arquitecto, con honorarios dignos, es la mejor defensa para un particular que se mete en el complicado mundo de la construcción. Y no le va a engañar, lo que si le puede es desengañar sobre los duros a peseta y poner los pies sobre la tierra. Su trabajo es algo más que un diseño y unas medidas sobre un papel; es averiguar lo que a vd. le viene bien en todos los aspectos, incluso a sus aficiones y gustos. Nuestra pasión es la arquitectura, con un compromiso de unir diseño y funcionalidad, sin olvidarnos de la economía en el proceso de construcción de la obra.

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Asumimos el propósito de hacer tu sueño una realidad; sin que tengas que preocuparte de nada ni por nada, porque para eso estamos nosotros, implicándonos en el proyecto desde el principio hasta el final.

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Además de cualquier tarea propia de un estudio de arquitectura hacemos:

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•PROYECTOS DE DISTRIBUCION, donde mediante planos, infografías se fija la distribución de los espacios y las características generales de los materiales y sistemas constructivos a utilizar, esto equivaldría al PROYECTO BASICO

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•El PROYECTO DE EJECUCION, especifica las instalaciones, carpinterías, sistemas constructivos, materiales, así con la cantidad de cada elemento que se va a necesitar. Con este documento el constructor puede valorar exactamente cuanto va a costar la obra.

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•DIRECCION DE OBRA, fijando unas reuniones de visita de la obra con todos los implicados para solucionar dudas, imprevistos, controlar las calidades y vigilar que los conceptos facturados por el constructor sean los realmente empleados.

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Podemos ocuparnos sólo del proyecto o también de las gestiones y de la contratación de la obra.

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Para las personas ajenas a este mundo, la selección del arquitecto es difícil. Unas pautas para que la selección sea más fácil son las siguientes:

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1.Profesionalidad. Es imprescindible contratar a alguien con experiencia, serio y responsable. Busque un arquitecto comprometido, sincero y que no le oculte nada.

Un proyecto aunque sólo es papel tiene mucho trabajo, horas y experiencia detrás y cuando cambias algo en obra suele afectar al todo, por lo que hay que quitarse de la cabeza eso de que es un trámite para la licencia y luego ya haré yo lo que quiera.

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2.Similitud en el estilo de diseño del arquitecto. Aunque el proyecto se realice por y para el cliente; es el proyectista el que materializa sus ideas y conocimientos sobre el papel, por lo tanto cuanta más afinidad haya entre ambos estilos, el resultado será más rápido y mejor.

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3.El coste de los honorarios. Este es un factor importante, conviene un presupuesto detallado y por escrito de los servicios prestados.

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4.La confianza en ese técnico es un elemento tan importante como el presupuesto, ya que se trata de una colaboración muy estrecha, en la que generalmente se delegan muchas de las decisiones del proyecto. Esta sensación se suele detectar en la primera toma de contacto.

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5.Que conteste con rapidez a todas sus dudas (el tiempo a esperar puede suponer mas dinero a pagar), comunicación cliente / arquitecto. Que sea el que te informe y vea los problemas..... que te aconseje....... que este en la obra.....y vigile si se hace todo lo firmado en el presupuesto. Que el proyecto esté bien definido en las MEDICIONES por las cuales se hace el presupuesto. Es importante definir muy bien todas calidades, antes de firmar contrata....saber consecuencias de acometidas y su enlace.

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6.Finalmente, y no por ello menos importante, la calidad de la ejecución y las garantías. Te aconsejamos que visites alguna de las obras que haya llevado a cabo, incluso que hables con anteriores clientes, para que te cuenten cómo ha sido su experiencia.

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Valorando todos estos puntos podrá ir haciendo una idea de la persona que necesita para llevar a cabo su proyecto.

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Aprovechamos, desde nuestro estudio de arquitectura, para ponernos a su servicio, y así poderle ofrecer una solución para construir sus sueños. Póngase, en contacto con nosotros y estaremos encantados de ayudarle.